Otro de los cuadros más emblemáticos que reflejan el rostro humano es LA GIOCONDA también conocida como la MONA LISA.
Este cuadro de Leonardo Da Vinci parece encerrar muchos misterios y uno de ellos es la mirada y la sonrisa de su protagonista.
Nosotros hemos hecho nuestra propia versión y además un juego de ceras y témperas "El misterio de la sonrisa de la Mona Lisa".
Es sencillo (lo podéis hacer en casa): se hace un dibujo en un folio con una cera blanda de color blanco, después se pasa un pincel con acuarela por encima, y... descubrimos el dibujo misterioso que estaba oculto.
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